LadyCaribe

Estado civil: casado
Buscando: amistad
Zodiac sign: Géminis
Cumpleaños: 1966-06-20
Afiliado: 16/06/2007
Nadie sabe el valor d los momentos hasta q se convierten en recuerdos...
Puntos2más
Para mantener el nivel: 
Puntos necesarios: 198
Último juego
Poker Texas Hold'em

Poker Texas Hold'em

Poker Texas Hold'em
9 años 238 días hace

¿A quien pertenece el obsequio?

 

 

 

 

¿A quien pertenece el obsequio?

 

Cerca de Tokio vivía un gran samurai ya anciano, que se dedicaba a enseñar a los jóvenes. A pesar de su edad, corría la leyenda de que todavía era capaz de derrotar a cualquier adversario.

   

Cierta tarde, un guerrero conocido por su total falta de escrúpulos, apareció por allí. Era famoso
por utilizar la técnica de la provocación: Esperaba a que su adversario hiciera el primer movimiento y, dotado de una inteligencia privilegiada para reparar en los errores cometidos, contraatacaba con velocidad fulminante. El joven e impaciente guerrero jamás había perdido una lucha.
Con la reputación del samurai, se fue hasta allí para derrotarlo y aumentar su fama. Todos los estudiantes se manifestaron en contra de la idea, pero el viejo aceptó el desafío. Juntos, todos se dirigieron a la plaza de la ciudad y el joven comenzaba a insultar al anciano maestro.

  


Arrojó algunas piedras en su dirección, le escupió en la cara, le gritó todos los insultos conocidos -ofendiendo incluso a sus ancestros-.  Durante horas hizo todo por provocarlo, pero el viejo permaneció impasible. Al final de la tarde, sintiéndose ya exhausto y humillado, el impetuoso guerrero se retiró. Desilusionados por el hecho de que el maestro aceptara tantos insultos y provocaciones, los alumnos le preguntaron:

 -¿Cómo pudiste, maestro, soportar tanta indignidad? ¿Por qué no usaste tu espada, aún sabiendo que podías perder la lucha, en vez de mostrarte cobarde delante de todos nosotros?

 

 El maestro les preguntó: -Si alguien llega hasta ustedes con un regalo y ustedes no lo aceptan, ¿a quién pertenece el obsequio?

 

-A quien intentó entregarlo- respondió uno de los alumnos.
- Lo mismo vale para la envidia, la rabia y los insultos -dijo el maestro-. Cuando no se aceptan, continúan perteneciendo a quien los llevaba consigo.

 

Limítate a ser quién eres: sereno, transparente y brillante.

Cuando irradiamos lo que somos, cuando sólo hacemos lo que deseamos hacer, ésto aparta automáticamente a quienes nada tienen que aprender de nosotros, y atrae a quienes sí tienen algo que aprender y también algo que enseñarnos.



Richard Bach

No hay futuro que no surja de su pasado, es decir, el presente que hoy vives.No temas por el futuro, sino que cuida del pasado. Y el pasado del futuro se esconde en el presente que se desarrolla ante tus ojos. Eres el arquitecto de este momento y puedes, con un simple gesto, definir toda una existencia, la tuya. Así que, cuida de las semillas que siembras y disfrutarás el más maravilloso futuro que cualquier ser humano merece.

 

https://www.youtube.com/watch?v=HcWyA0jHGnU


♪*♪Halloween-Aqua ♪*♪

  

 

https://www.youtube.com/watch?v=wn1r2JBjDgY

 

 

FELIZ HALLOWEEN

Un abrazo apretadito en sus corazones...

 

 

 


Orgullo o Dignidad

   

 

Es cuestión de palabras, y, no obstante...

ni tú ni yo jamás...

después de lo pasado, convendremos...

en quien la culpa está...

Lástima que  el amor un diccionario...

no tenga donde hallar...

cuando el orgullo es simplemente orgullo...

y cuando es dignidad...!!!

(Gustavo Adolfo Becquer)

https://www.youtube.com/watch?v=-MbCNMSnGEA

 

 

Orgullo o dignidad

Todos tenemos claro, más o menos, que el orgullo es un lastre inútil e inconveniente en nuestras relaciones. A pesar de eso, hay muchas personas que aún lo siguen utilizando, a veces a pesar suyo, y lo llevan como bandera, para salvaguardar su estima personal.

 

¡Cuántas amistades, cuántas relaciones se fueron al traste por culpa del orgullo! ¡Cuánto trabajo cuesta a veces dirigirse a alguien, preguntarle qué le pasa, decirle que lo queremos! Esperando que él de el primer paso, se nos pasa el tiempo prudente en que sería fácil y cómodo solucionar algún malentendido, o una situación poco clara.

 

Y luego, cada vez es más difícil; cuanto más tiempo pasa, nos parece menos adecuado dar ese paso que nos abriría de nuevo las puertas hacia esa amistad, o esa relación perdida...

 

Pero, ¿qué hay cuando lo que sucede es lo contrario? Cuando una persona, por tanto prescindir de esa carga estúpida que es el orgullo, no sabe cuándo está poniendo en juego su propia dignidad. Cuando alguien duda sobre si está traspasando o no los límites, a veces no demasiado claros, entre estas dos opciones...

 

Esto puede ocurrir cuando en una relación, una de las partes peca de orgullo, y la otra de lo contrario. ¿Hasta dónde se debe llegar? ¿Cómo se puede saber si es el orgullo lo que está frenando a esa otra persona, o, simplemente, es que no le interesa tu amistad?

 

Supongo que el tiempo debe dar la respuesta, y no debería ser un tiempo excesivamente largo. Y también el corazón, él nos debe guiar en nuestros pasos, pero siempre, siempre, ante la duda, es preferible volverlo a intentar, mientras quede alguna esperanza. No hay por qué creer que se pierde la dignidad por eso.


(Ana María Fernández)

 


Feliz Dia de las Brujas

               

                       

 

   

 Un Deseo de Halloween

La luna cuelga a lo alto en esta noche a paso ligero
rayos naranja emitir un resplandor
extraña y ajena…
Sin embargo, suave y relajante
Y de alguna manera todavía brillante

 

La gente corre de aquí para allá
Llenando el aire con gritos y risas
En contraste y descordinadamente
Bajo el resplandor de la luna

 

Y yo estoy aquí en otra forma
Sólo por esta noche
Sólo para esta noche
Lleno de alegría y de tristeza

 

 

 

                          

 

            

 

          

 

     

 

       

 

  

 

 

 

     

 

               

 

 

 

      

 

 

 

 

 

 

 

Gracias x todos tus lindos comentarios....

 

https://www.youtube.com/watch?v=kBUQ2aB57bc

GOTAS DE SENTIMIENTOS

        Muchas veces depositamos nuestros sentimientos

en los corazones de las personas que pasan y las que forman parte de nuestras vidas,

   dejando gotas de alegría tristeza, sonrisas y lagrimas.

 

A veces nos equivocamos con las personas a las ofrecemos esos sentimientos

 y eso nos deja una sensación de temor en volver a confiar..

 

Gotas de sentimientos valoradas y no valoradas,

tanto nos cuesta decir te quiero,

 parece una palabra sumergida en una gran simplicidad,

pero llena del calor de los sentimientos.

 

Debemos buscar en nuestros corazones, la solidaridad, respeto,

sentido común, ternura, confianza, amor, amistad,

son pequeñas gotitas que nos marcan como personas

y también a quienes nos rodean.

No importa cuanta veces nos equivoquemos

con las personas a quienes le brindamos lo mejor de nosotros,

porque mientras esas gotitas sigan fluyendo dentro de nuestro ser,

podremos aprender con facilidad a demostrar,

hacer sentir sin duda e inseguridad o miedo un te quiero

y lo importante que es sentirse querido...

 

 

 

 

 

  

 

       

 

 

 

       

 

  

 

 

 

    

       

 

 

 

 

 

 


"George Carlin"

La paradoja de nuestro tiempo es que tenemos edificios más altos y temperamentos más reducidos, carreteras más anchas y puntos de vista más estrechos. Gastamos más pero tenemos menos, compramos más pero disfrutamos menos. Tenemos casas más grandes y familias más chicas, mayores comodidades y menos tiempo. Tenemos más grados académicos pero menos sentido común, mayor conocimiento pero menor capacidad de juicio, más expertos pero más problemas, mejor medicina pero menor bienestar.


Bebemos demasiado, fumamos demasiado, despilfarramos demasiado, reímos muy poco, manejamos muy rápido, nos enojamos demasiado, nos desvelamos demasiado, amanecemos cansados, leemos muy poco, vemos demasiada televisión y oramos muy rara vez.

Hemos multiplicado nuestras posesiones, pero reducido nuestros valores. Hablamos demasiado, amamos demasiado poco y odiamos muy frecuentemente.

Hemos aprendido a ganarnos la vida, pero no a vivir. Añadimos años a nuestras vidas, no vida a nuestros años. Hemos logrado ir y volver de la l
una, pero se nos dificulta cruzar la calle para conocer a un nuevo vecino. Conquistamos el espacio exterior, pero no el interior. Hemos hecho grandes cosas, pero no por ello mejores.


Hemos limpiado el aire, pero contaminamos nuestra alma. Conquistamos el átomo, pero no nuestros prejuicios. Escribimos más pero aprendemos menos. Planeamos más pero logramos menos. Hemos aprendido a apresurarnos, pero no a esperar. Producimos computadoras que pueden procesar mayor informacion y difundirla, pero nos comunicamos cada vez menos y menos.

Estos son tiempos de comidas rápidas y digestión lenta, de hombres de gran talla y cortedad de carácter, de enormes ganancias económicas y relaciones humanas superficiales. Hoy en día hay dos ingresos pero más divorcios, casas más lujosas pero hogares rotos. Son tiempos de viajes rápidos, pañales desechables, moral descartable, acostones de una noche, cuerpos obesos, y píldoras que hacen todo, desde alegrar y apaciguar, hasta matar. Son tiempos en que hay mucho en el escaparate y muy poco en la bodega. Tiempos en que la tecnología puede hacerte llegar esta carta, y en que tú puedes elegir compartir estas reflexiones o simplemente borrarlas.

 
Acuérdate de pasar algún tiempo con tus seres queridos porque ellos no estarán aquí
siempre.

 

Acuérdate de ser amable con quien ahora te admira, porque esa personita crecerá muy pronto y se alejará de ti.


 

Acuérdate de abrazar a quien tienes cerca porque ése es el único tesoro que puedes dar con el corazón, sin que te cueste ni un centavo.


Acuérdate de decir te amo a tu pareja y a tus seres queridos, pero sobre todo dilo sinceramente. Un beso y un abrazo pueden reparar una herida cuando se dan con toda el alma.


Acuérdate de tomarte de la mano con tu ser querido y atesorar ese momento, porque un día esa persona ya no estará contigo.


Date tiempo para amar y para conversar, y comparte tus más preciadas ideas.

 
Y siempre recuerda:
La vida no se mide por el número de veces que tomamos aliento, sino por los extraordinarios momentos que nos lo quitan.

(George Carlin)

(Comediante Estadounidense)